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  • Sistema de inmigración de Irlanda

    Aspectos principales:
    La principal legislación que regula la entrada y residencia de extranjeros en el Estado es la Ley de Extranjería de 1935 y la Orden de Extranjería 1946 en su forma enmendada, junto con los reglamentos de aplicación de las Directivas de la UE sobre los derechos de residencia. Además, la Ley de Inmigración de 1999 establece los principios y procedimientos que rigen la expulsión de los no ciudadanos del Estado. Este marco legislativo establece que todos los nacionales de países no pertenecientes al EEE requieren el permiso del Ministro de Justicia e Igualdad para residir en el Estado.
    Ciertos nacionales de países no pertenecientes al EEE necesitan un visado antes de entrar en el Estado y es función de la Secretaría de Relaciones Exteriores procesar las solicitudes de visa a través de su red de embajadas y otras oficinas consulares en el extranjero.
    En vista de la responsabilidad del Ministro de Justicia y la Reforma legislativa en materia de inmigración en general, los parámetros de la política general en relación con las cuestiones de visado son, sin embargo, establecidos por él. A las Embajadas se les ha concedido autorización para decidir sobre ciertas categorías de solicitudes, pero otras son remitidas al Departamento de Justicia y Equidad para tomar la decisión.
    Todos los nacionales de países no pertenecientes al EEE, necesiten visa o no, están sujetos a controles de inmigración a su llegada al Estado. Estos controles se aplican de forma ocasional a las personas que llegan desde el interior de la zona de tránsito común entre Irlanda y el Reino Unido y sistemáticamente a las personas que llegan de fuera de la zona de tránsito común. En términos generales, a una persona le puede ser concedido a su llegada un permiso para permanecer hasta 90 días en calidad de visitante, a condición de que convenza al oficial de inmigración que tiene fondos suficientes para mantenerse a sí mismo, que tiene un visado válido cuando éste sea necesario y que no violara la inmigración irlandesa u otras leyes.
    Los ciudadanos no pertenecientes al EEE que solicitan permiso para entrar con el fin de ejercer un empleo por lo general requieren un permiso de trabajo. Las solicitudes de permisos de trabajo son procesados por el Departamento de Empresa, Comercio e Innovación y la no posesión de un permiso, si la intención es ejercer un empleo es motivo para la denegación de la entrada.
    Las personas que deseen residir en el Estado durante más de 90 días deben inscribirse en el registro oficial de la policía local y solicitar el permiso adicional para permanecer antes de que su permiso inicial de entrada expire. Los principales motivos por los que se puede obtener el permiso adicional son: por trabajo, para estudiar, para dirigir un negocio o como miembro dependiente de la familia a cargo de un irlandés residente en el Estado o de un nacional del EEE residente en el Estado. A otros grupos de personas también se les concede permiso para quedarse, incluyendo a las personas que se benefician de una licencia humanitaria para permanecer otorgada por el Ministro. Deben cumplirse ciertos criterios particulares para obtener el permiso para permanecer en cualquiera de las categorías antes mencionadas y, en el caso de los nacionales que necesitan un visado, generalmente el permiso para permanecer no será ampliado para aquellas personas que entraron con visados de corta estancia.